viernes, julio 5, 2024

Luis Froylán Castañeda

spot_img

Un grupo de exgobernadores, entre los cuales están Fernando y Reyes Baeza (de Patricio no hay constancia) exigen la renuncia de Alejandro Moreno, el impresentable presidente del PRI que pretende reelegirse en la próxima asamblea, consolidando así el secuestro al viejo partido.

Ninguno de los manifestantes se chupa el dedo, todos son políticos experimentados y en consecuencia saben que “alito” no dejará jamás la dirigencia del Partido, llegó para quedarse y administrar las migajas del poder. Senadurías, diputaciones y las rentas en forma de prerrogativas siguen siendo apetecibles.

Más que la protesta en sí, lo interesante es que ese grupo podría ser la base de un movimiento más amplio, que bien gestionado sería el inicio de un nuevo partido político de perfil ciudadano cuyo fin sería ofrecer una resistencia opositora competitiva al régimen que pretende instalar un partido hegemónico.

La necesidad social ahí está, la Marea Rosa lo demostró más de una vez saliendo a las calles y si el enorme impulso no pudo capitalizarse en votos, el resultado final no es nada despreciable. Los millones de mexicanos que votaron por Xóchitl, casi dieciseis, es una poderosa base para iniciar con la tarea de reemprender la reconstrucción nacional.
El PRI de Alejandro Moreno, lo he dicho en otros momentos, terminará de palero, vulgar comparsa del régimen. Debemos contarlo desde ahora como otro PT, Verde, MC, satélites al servicio de los intereses creados en torno al nuevo jefe máximo, líder moral, tlatoani mayor o como cada quien decida llamarle, el hecho concreto es que así como “alito” en el PRI, López Obrador llegó para quedarse.

Por eso la importancia de crear un nuevo partido político que recoja las legitimas dudas ciudadanas en cuanto al rumbo que toma el país. Muchos mexicanos siguen teniendo dudas sobre la seguridad de sus pensiones, de sus propiedades. Con razón o sin ella, temen verse afectados mañana o pasado por medidas de tipo chavistas.

Estos exgobernadores priistas pueden ser la base de ese gran movimiento social que termine generando un nuevo partido político, dado que el PRI ya lo contamos del otro lado, como dije arriba, y el PAN está en franca decadencia. Cada vez son más los mexicanos que jamás votarían por candidatos panistas.

Ninguno de los dos partidos son alternativas confiables para los mexicanos que desean un país mejor. Porque si el nuevo régimen ha demostrado ser políticamente muy exitoso, administrativamente es fatal; está reprobado en Salud, Seguridad, Finanzas, Educación, Desarrollo Económico.

Los mexicanos libres no podemos vivir de promesas ni justificar los errores del presente con la cantaleta de que “si, pero los del prian robaban más”. Han recibido todo el poder y lo están usando para desmantelar las instituciones, no para gobernar pensando en desarrollar el país.

Hace falta un movimiento social exigente con el gobierno, los gobernadores inconformes contra alito representan una pequeña luz de esperanza, si tienen la capacidad de recoger el sentir de los mexicanos inconformes representados en la marea rosa.

Rompeolas

Pintar la raya con López Obrador sería pintarla con el pueblo, dice la presidenta electa Claudia Sheinbaum. Si habla en serio, porque de los políticos hay que dudar hasta de los buenos días, está diciendo que AMLO es el pueblo y supongo que así lo cree, pues está proponiendo el primero de junio como nuevo día feriado, en honor al presidente. Lo están haciendo un héroe en vida. Él feliz, colma su enorme ego. También pueden proponer santificarlo, ya encarrilados que más da.

spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img

Últimas noticias